Extreme ways

La inclusión de la letra Ñ en los dominios com.ar es un avance hacia el proceso democratizador de la WEB. Una letra más o menos hace al mundo? Como el hábito? Como el cero? Sí, por supuesto.
Entre Portugal y Francia, no existe un país que se llama Espana. Quien está allí es España. No es lo mismo una caña que un cana. Al tomar un diccionario, entre la palabra NyLon y O; ¿no solemos encontrar unas cuantas palabras más? Si habitualmente encontramso a la Ñ allí, ¿por qué no sucede lo mismo en los dominios en español?
La libertad cultural no puede ni debe quedar en manos de servidores ni empresas multinacionales. La pluralidad linguística es un derecho y propiedad de todos. Muchas veces, como en el caso citado por Lessig sobre la familia Causby, la tecnología interfiere en nuestra propiedad.
La estructura horizontal de la WEB se contradice a veces con el aplanamiento cultural producido por la hegemonía de algunos grupos. Sabemos que la cultura anglosajona no es ni más ni menos importante que la latina, oriental o cualquier otra. Simplemente somos diferentes e Internet es el espacio donde debe convivir el multiculturalismo y las diferencias.